miércoles, 5 de diciembre de 2012

Triunfó el proyecto

La coronación de Vélez Sarsfield como campeón del Torneo Inicial de fútbol de la República Argentina, no hace más que consolidar un estilo de juego y de conducción, dignos de ser admirados. La estructura de trabajo y las decisiones que caracterizan a la historia del Fortín, deberían ser imitadas por el resto de las instituciones.

Para diluir el vicio y romper con el vínculo que denota el fútbol con los acuerdos y actividades ilegales, se debe contraponer esta cara de la moneda. Concebir al deporte desde su verdadera esencia, resulta un acto difícil de concretar en este país, debido a las mafias que aquejaron todos los sectores y ámbitos sociales. La trampa y el engaño se denotaron como las soluciones para el triunfo rápido y certero, sin embargo algunos se animaron a romper con dichos paradigmas. Lejos de las conducciones presidencialistas gobernadas por empresarios de turno, Vélez se concentró en otros objetivos finales. Sus metas preestablecidas caminaban del lado del éxito deportivo, no de la búsqueda de un enriquecimiento a costas de la entidad. Y vaya que demostró que la paciencia y el trabajo son los ingredientes suficientes para lograr esas victorias tan anheladas.

Las décadas colocaron a la institución de Liniers en los escalones más altos del nivel deportivo, transformándose en la envidia y codicia de los embaucadores, que sólo lograron generar deudas a largo plazo en todas las entidades futbolísticas. Apañados por la AFA y sus concesiones, fueron dilapidando la fortuna de los clubes y destruyendo las capacidades edilicias de los mismos.
Hoy, el nuevo paradigma de conducción parece renacer ante los nuevos dirigentes. El desprecio al viejo esquema, provoca en las nuevas generaciones una necesidad de tomar el poder, para batallar contra los molinos aún vigentes.

Vélez es el gran referente y cuenta en sus filas con energía para rato. La propuesta de imitar esos procesos se reflejan de manera permanente, buscando concientizar a las conducciones. ¿Será que el fútbol podrá sobrevivir de alguna otra manera?