Quienes lo practican
aseguran que va más allá de lo físico
en auge en la ciudad de
Rosario, crece a pasos agigantados
Por Pamela Roldán
Para muchos la
práctica del skate no es sólo realizar un deporte y ser rider, sino que es más
que eso, se trata de un estilo de vida. Muchos son los que llevan a cabo esta
disciplina no solamente en la ciudad de Rosario, se extiende por todo el país.
El skate es un deporte que comenzó a realizarse en California en la década del
60, se inventó cuando en un momento dejaron de haber olas, ya que hubo una
especie de tormenta que hizo que las playas prácticamente se destruyeran y no
se pudiera surfear mucho. Entonces, cortaron un pedazo de madera chiquito de la
tabla de surf y le pusieron ruedas, de las que se usaban en los patines
artísticos. Y así intentaron a patinar con esos elementos.
Con el paso del tiempo, el deporte fue
progresando y lo primero que hicieron fue andar en piletas o esquivar conos en
lo que eran bajadas. Aparecieron otras formas de tablas, más similares a las
que se utilizan actualmente, que tienen una colita y una parte delantera para
poder saltar. Ya en años posteriores, empezaron a hacer trucos y surgió lo que
hoy en día es el street, que es el skate callejero, en el que se hacen
distintos tipos de pruebas.
Además del street, se pueden encontrar con
otros estilos dentro del mismo deporte. Existe el bert, que se realiza en
estructuras símiles a medias tuberías y también se usan bowls, como piletas. Se
incluye el downhill, que son las pistas en descenso, en el que se usan otros
tipos de tablas y serían competencias catalogadas como carreras. El slalom
consta de ir esquivando conos y, por último la modalidad, freestyle o freeride
del longboard, que es ir haciendo pruebas sin muchos saltos. Dentro de este
deporte, a causa de la amplia cantidad de subdisciplinas, es inminente llevar a
cabo todos u obtener buenos resultados al 100 por ciento.
En este caso, Fernando Raimondi, quien
pertenece al team de “Boards Paradise” –uno de los primeros en Argentina-,
dijo: “Vos podés hacer de todo, pero siempre te especializás en una modalidad y
lo que más te guste es lo que más hacés. Por ahí es muy difícil ser bueno en
todo, a no ser que estés las 24 horas patinando, pero no hay nadie que sea
bueno en todo”.
En Argentina hace unos 20 años que se conoce
el skate y en Rosario se lo puede ver en las calles desde hace no menos de 15.
“En Rosario, ahora está como de moda. Hace más o menos dos años que está de
moda, si bien el deporte acá hace muchos años que está”, expresó Fernando.
Además, existen muchos skateshops, o diferentes marcas que sponsorean a chicos,
que es también lo que los motiva a llevar a cabo la disciplina.
Además se puede ver que se están construyendo
diferentes skateparks, pero según cuenta el rider “todo lo que se hace es por
el mismo movimiento de los chicos y no por el impulso de un gobierno o algún
ente privado”. En la ciudad todavía es un deporte amateur, a nivel profesional
está mucho más desarrollado en Mar del Plata y Buenos Aires.
En lo que respecta a las competencias que se
pueden realizar, hay de todo tipo, como locales, nacionales, provinciales e
internacionales. En lo que es skate, hay muchísimas competencias y las más
significativas son las que organiza la Asociación Argentina de Skate. Estas
constan de un circuito, donde también hay torneos en distintas localidades y
después a fin de año hay un ganador total.
“La mayoría cuando toman buen ritmo de
competencia se tienen que ir del país porque acá, en Argentina, te limita
mucho”. Hay empresas que apuestan al competidor, pero de la forma que lo hacen
no es lo mismo que afuera. Son otros capitales y otras formas de pensar.
Generalmente los chicos empiezan a practicar y
a entrenar desde pequeños, pero llega un punto en el que se anotan en
competencias e inician a medirse en cuanto al rendimiento. Por eso, el
profesionalismo depende del nivel alcanzado o la categoría en la que te anotas,
pero claro está que todos intentan ser profesionales cuando hay marcas que los
apoyan. Ya sean marcas de tablas, de ropa o de otros elementos. “Cuando estas
trabajando y estas dedicando tu tiempo, tiempo de tu vida y de tu día para eso
y además cobras, ya es ahí cuando empezás a ser profesional”, sentenció Raimondi.
Tal como el rugby, el atletismo o el hockey,
el skate es un deporte completamente amateur. En el que la Asociación Argentina
a algunos chicos les brinda algún beneficio, pero no es mucho lo que pueden
lograr. La misma es una entidad sin fines de lucro que no recauda mucho y lo
poco que recauda lo deriva para skateparks e invertir en lugares donde se pueda
entrenar. Todavía no están en esa etapa de darle el dinero a algún rider
determinado, sino que cumplen una función más general. Fernando contó que “las
que aportan son las diferentes empresas, que son las que se encargan del
sueldo, por decirlo de alguna manera”.
Lo que al entrenamiento compete, Raimondi,
dijo: “Es relativo al deporte que se practique. Pero tenés que ir al gimnasio,
hacer una dieta y eso también depende de cómo se lo tome uno”. Y agregó que se
usan determinados días para patinar y días para ir al gimnasio o entrenar y
correr.
“Hay gente que para el downhill come mucho
para engordar porque mientras más engordás, más rápido bajás”, apuntó en
relación a una de las disciplinas en la que él se especializa. Por eso también
agregó: “En momentos determinados comés mucho para engordar y después si hay un
torneo de freeride, Freestyle o en otra modalidad, es al contrario. Te conviene
bajar de peso así tenés mas agilidad, por eso todo es relativo. También hay
chicos que no hacen nada y sin embargo ya tienen genética y les va bien”.
Finalmente, a lo que todo rider aspira cuando va tomando mayor ritmo de competencia es quizás llegar a competencias internacionales. Pero para esto necesitan esforzarse y estar en un nivel avalado por alguna asociación que expande el país en representación.
Finalmente, a lo que todo rider aspira cuando va tomando mayor ritmo de competencia es quizás llegar a competencias internacionales. Pero para esto necesitan esforzarse y estar en un nivel avalado por alguna asociación que expande el país en representación.
“No es que uno
simplemente puede viajar y anotarse, o que ponés la plata y te anotan. Ellos
seleccionan a riders de distintos países y los convocan”, concluyó Fernando.
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